sábado, 17 de noviembre de 2012

Sábado, 17 de Noviembre de 2012





TEXTO DEL DIA

CITA BIBLICA
Descripción Biblia

Referencias BIBLICAS
*** Texto del Sábado, 17 de Noviembre de 2012 ***
Sábado 17 de noviembre
Levanté sobre ustedes atalayas (Jer. 6:17).



► es12 pág. 114 Noviembre
(Jeremías 6:17)
“Y levanté sobre ustedes atalayas:
(Isaías 21:11) La declaración formal contra Dumá: Hay uno que a mí clama desde Seír: “Atalaya, ¿qué hay de la noche? Atalaya, ¿qué hay de la noche?”.
(Jeremías 25:4) Y Jehová les envió todos sus siervos los profetas, madrugando y enviándo[los], pero ustedes no escucharon, ni inclinaron su oído para escuchar,
(Ezequiel 3:17) “Hijo del hombre, atalaya es lo que te he hecho a la casa de Israel, y tienes que oír habla de mi boca y tienes que advertirles de mi parte.
(Habacuc 2:1) En mi puesto de guardia ciertamente seguiré de pie, y ciertamente me quedaré apostado sobre [el] baluarte; y vigilaré, para ver lo que él hablará por mí y lo que responderé ante la censura para mí.

(Génesis 32:3) Entonces envió Jacob mensajeros delante de sí a Esaú su hermano, a la tierra de Seír, al campo de Edom,
(Deuteronomio 2:8) Así que pasamos alejándonos de nuestros hermanos, los hijos de Esaú, que moran en Seír, desde el camino del Arabá, desde Elat y desde Ezión-guéber. ”En seguida nos volvimos y procedimos a pasar adelante por el camino del desierto de Moab.
(Salmo 137:7) Acuérdate, oh Jehová, respecto a los hijos de Edom del día de Jerusalén, que estuvieron diciendo: “¡Arrásen[la]! ¡Arrásen[la] hasta el fundamento dentro de ella!”.
(Revelación 16:15) 15 “¡Mira! Vengo como ladrón. Feliz es el que se mantiene despierto y guarda sus prendas de vestir exteriores, para que no ande desnudo y la gente mire su vergüenza.”
(Jeremías 7:13) Y ahora, por la razón de que ustedes siguieron haciendo todas estas obras —es la expresión de Jehová—, y yo seguí hablándoles, madrugando y hablando, pero no escucharon, y seguí llamándolos, pero no respondieron,
(Jeremías 29:19) debido al hecho de que no han escuchado mis palabras —es la expresión de Jehová— que les he enviado con mis siervos los profetas, madrugando y enviándo[los].’ ”‘Pero ustedes no han escuchado’, es la expresión de Jehová.
(Jeremías 44:4) Y les seguí enviando todos mis siervos los profetas, madrugando y enviando, diciendo: “No hagan, por favor, esta clase de cosa detestable que he odiado”.
(Zacarías 7:11) Pero ellos siguieron rehusando prestar atención, y siguieron presentando un hombro terco, e hicieron sus oídos demasiado insensibles para oír.
(Hechos 7:51) ”Hombres obstinados e incircuncisos de corazón y de oídos, siempre están ustedes resistiendo el espíritu santo; como hicieron sus antepasados, así hacen ustedes.
‘¡Presten atención al sonido del cuerno!’.”
(Isaías 58:1) 58 “Clama a voz en cuello; no te retengas. Levanta tu voz justamente como un cuerno, y anuncia a mi pueblo su sublevación, y a la casa de Jacob sus pecados.

(Salmo 40:9)  9 He anunciado las buenas nuevas de la justicia en la congregación grande. ¡Mira! No restrinjo mis labios. Oh Jehová, eso tú mismo lo sabes bien.
(Isaías 1:2) Oigan, oh cielos, y presta oído, oh tierra, porque Jehová mismo ha hablado: “Hijos he criado y educado, pero ellos mismos se han sublevado contra mí.
(Isaías 31:6) “Vuelvan a Aquel contra quien los hijos de Israel han ido a lo profundo en su sublevación.
(Isaías 59:13) Ha habido transgresión y negación de Jehová; y hubo un movernos hacia atrás de [estar] con nuestro Dios, un hablar de opresión y sublevación, un concebir y un hablar entre dientes palabras de falsedad desde el corazón mismo.
Pero ellos siguieron diciendo: “No vamos a prestar atención”.
(Zacarías 7:11) 11 Pero ellos siguieron rehusando prestar atención, y siguieron presentando un hombro terco, e hicieron sus oídos demasiado insensibles para oír.


(2 Reyes 17:14) y ellos no escucharon, sino que siguieron endureciendo la cerviz como la cerviz de sus antepasados que no habían ejercido fe en Jehová su Dios;
(2 Crónicas 33:10) Y Jehová siguió hablando a Manasés y su pueblo, pero ellos no prestaron atención.
(Proverbios 1:24) Porque he llamado, pero ustedes siguen rehusando; he extendido la mano, pero no hay nadie que preste atención,
(Jeremías 6:10) “¿A quién hablaré y advertiré, para que oigan? ¡Mira! Su oído es incircunciso, de manera que no pueden prestar atención. ¡Mira! La mismísima palabra de Jehová ha venido a ser para ellos un oprobio, en la cual [palabra] no pueden deleitarse.
(Nehemías 9:29) 29 Aunque dabas testimonio contra ellos para traerlos de vuelta a tu ley, ellos mismos hasta actuaban presuntuosamente y no escuchaban tus mandamientos; y pecaron contra tus propias decisiones judiciales, las cuales, si un hombre [las] pone por obra, entonces tendrá que vivir mediante ellas. Y siguieron dando un hombro terco, y endurecieron su cerviz, y no escucharon.
(Isaías 6:10) Haz el corazón de este pueblo indispuesto a recibir, y haz sus mismísimos oídos indispuestos a responder, y pégales los mismísimos ojos, para que no vean con los ojos y no oigan con los oídos, y para que su propio corazón no entienda, y para que realmente no se vuelvan y consigan curación para sí”.
(Jeremías 25:7) ”‘Pero ustedes no me escucharon —es la expresión de Jehová—, con el intento de ofenderme con la obra de sus manos, para calamidad a ustedes mismos.’
(Zacarías 1:4) ”‘No se hagan como sus padres a quienes los profetas anteriores llamaron, diciendo: “Esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos: ‘Vuélvanse, por favor, de sus malos caminos y de sus malos tratos’”.’ ”‘Pero ellos no escucharon, y no me prestaron atención’, es la expresión de Jehová.
Es probable que Jeremías rondara los 25 años cuando recibió su comisión de vigía espiritual (Jer. 1:1, 2).
(Jeremías 1:1, 2)
Las palabras de Jeremías
(Esdras 1:1) Y en el primer año de Ciro el rey de Persia, para que se realizara la palabra de Jehová procedente de la boca de Jeremías, Jehová despertó el espíritu de Ciro el rey de Persia, de modo que él hizo pasar por todo su reino un pregón —y también por escrito— que decía:
(Daniel 9:2) en el primer año de reinar él, yo mismo, Daniel, discerní por los libros el número de los años acerca de los cuales la palabra de Jehová había ocurrido a Jeremías el profeta, para cumplir las devastaciones de Jerusalén, [a saber,] setenta años.
(Mateo 2:17) Entonces se cumplió lo que se había hablado por medio de Jeremías el profeta, que dijo:


(2 Crónicas 36:22) Y en el primer año de Ciro el rey de Persia, para que se realizara la palabra de Jehová por boca de Jeremías, Jehová despertó el espíritu de Ciro el rey de Persia, de modo que él hizo pasar por todo su reino un pregón, y también por escrito, que decía:
(Isaías 45:1) Esto es lo que ha dicho Jehová a su ungido, a Ciro, a quien he asido de la diestra, para sojuzgar delante de él naciones, para que yo desciña hasta las caderas de reyes; para abrir delante de él las puertas de dos hojas, de modo que las puertas mismas no estén cerradas:
(Daniel 10:1) En el tercer año de Ciro el rey de Persia un asunto fue revelado a Daniel, a quien se llamó por nombre Beltsasar; y el asunto era verdadero, y había un gran servicio militar. Y él entendió el asunto, y tuvo entendimiento en la cosa vista.
(Jeremías 25:12) ”‘Y tiene que ocurrir que, cuando se hayan cumplido setenta años, pediré cuentas al rey de Babilonia y a aquella nación —es la expresión de Jehová— por su error, aun a la tierra de los caldeos, y ciertamente haré de ella yermos desolados hasta tiempo indefinido.
(Jeremías 29:14) Y yo mismo ciertamente me dejaré hallar por ustedes —es la expresión de Jehová—. Y ciertamente recogeré a su cuerpo de cautivos y los juntaré a ustedes de todas las naciones y de todos los lugares a los cuales los he dispersado —es la expresión de Jehová—. Y de veras los traeré de vuelta al lugar del cual los hice ir al destierro.’
(Jeremías 33:11) el sonido del alborozo y el sonido del regocijo, la voz del novio y la voz de la novia, la voz de los que dicen: “¡Elogien a Jehová de los ejércitos, porque Jehová es bueno; porque hasta tiempo indefinido es su bondad amorosa!”’. ”‘Ellos estarán trayendo una ofrenda de acción de gracias a la casa de Jehová, porque yo traeré de vuelta a los cautivos de la tierra tal como al comienzo’, ha dicho Jehová.”
(Proverbios 21:1) 21 El corazón de un rey es como corrientes de agua en la mano de Jehová. Adondequiera que él se deleita en hacerlo, lo vuelve.
(2 Crónicas 24:9) Después de aquello emitieron un pregón por todo Judá y Jerusalén para que se trajera a Jehová el impuesto sagrado que Moisés el siervo del Dios [verdadero] había ordenado sobre Israel en el desierto.
(2 Crónicas 30:5) Por lo tanto, se decidieron a hacer pasar el pregón por todo Israel, desde Beer-seba hasta Dan, para que vinieran a celebrar la pascua a Jehová el Dios de Israel en Jerusalén; porque no lo habían hecho como multitud conforme a lo que está escrito.
(Ester 3:12) Entonces se llamó a los secretarios del rey en el primer mes, en el día trece de él, y se efectuó la escritura conforme a todo lo que Hamán mandó a los sátrapas del rey y a los gobernadores que estaban sobre los diferentes distritos jurisdiccionales, y a los príncipes de los diferentes pueblos, de cada distrito jurisdiccional, en su propio estilo de escribir, y a cada pueblo en su propia lengua; en el nombre del rey Asuero se escribió, y se selló con el anillo de sellar del rey.
(Ester 8:10) Y él procedió a escribir en el nombre del rey Asuero y a sellar con el anillo de sellar del rey, y a enviar documentos escritos por mano de los correos a caballo, montados en caballos de posta usados en el servicio real, hijos de yeguas veloces,
(Daniel 6:8) Ahora, oh rey, dígnate establecer el estatuto y firmar el escrito, para que no se cambie, conforme a la ley de los medos y los persas, que no se anula”.
hijo de Hilquías, uno de los sacerdotes que estaban en Anatot,
(Josué 21:18) Anatot y su dehesa, y Almón y su dehesa; cuatro ciudades.
(1 Reyes 2:26) Y a Abiatar el sacerdote el rey dijo: “¡Vete a Anatot a tus campos! Pues mereces la muerte; pero en este día no te daré muerte, porque llevaste el arca del Señor Soberano Jehová delante de David mi padre, y porque sufriste aflicción durante todo el tiempo que mi padre sufrió aflicción”.
(1 Crónicas 6:60) y de la tribu de Benjamín, Gueba con sus dehesas y Alémet con sus dehesas y Anatot con sus dehesas. Todas sus ciudades fueron trece ciudades entre sus familias.
(Jeremías 29:27) ahora, pues, ¿por qué no has reprendido a Jeremías de Anatot, que está portándose como profeta para con ustedes?

(1 Reyes 2:26) Y a Abiatar el sacerdote el rey dijo: “¡Vete a Anatot a tus campos! Pues mereces la muerte; pero en este día no te daré muerte, porque llevaste el arca del Señor Soberano Jehová delante de David mi padre, y porque sufriste aflicción durante todo el tiempo que mi padre sufrió aflicción”.
(Isaías 10:30) Dé tu voz gritos agudos, oh hija de Galim. Presta atención, oh Laisa. ¡Oh afligida, Anatot!
(Jeremías 1:1) Las palabras de Jeremías hijo de Hilquías, uno de los sacerdotes que estaban en Anatot, en la tierra de Benjamín;
(1 Crónicas 6:60) 60 y de la tribu de Benjamín, Gueba con sus dehesas y Alémet con sus dehesas y Anatot con sus dehesas. Todas sus ciudades fueron trece ciudades entre sus familias. . .
(1 Samuel 22:20) Sin embargo, un hijo de Ahimélec hijo de Ahitub, cuyo nombre era Abiatar, logró escapar, y fue huyendo para seguir a David.
(1 Reyes 1:7) Y él llegó a tener tratos con Joab hijo de Zeruyá y con Abiatar el sacerdote, y ellos empezaron a ofrecer ayuda como seguidores de Adonías.
(1 Reyes 2:22) 22 Ante esto, el rey Salomón respondió y dijo a su madre: “¿Y por qué estás solicitando a Abisag la sunamita para Adonías? Solicita también para él la gobernación real (porque es mi hermano que es mayor que yo), aun para él y para Abiatar el sacerdote y para Joab hijo de Zeruyá”.


en la tierra de Benjamín;
(Josué 18:11) 11 Entonces se sacó la suerte de la tribu de los hijos de Benjamín, por sus familias, y el territorio de su suerte salió entre los hijos de Judá y los hijos de José.


2 a quien le ocurrió la palabra de Jehová en los días de Josías
(2 Reyes 22:1) 22 Ocho años de edad tenía Josías cuando empezó a reinar, y por treinta y un años reinó en Jerusalén. Y el nombre de su madre era Jedidá hija de Adaya de Bozqat.


hijo de Amón,
(2 Reyes 21:19) 19 Veintidós años de edad tenía Amón cuando empezó a reinar, y por dos años reinó en Jerusalén. Y el nombre de su madre era Mesulémet hija de Haruz de Jotbá.


el rey de Judá, en el año decimotercero de reinar él.
(2 Crónicas 34:1) Ocho años de edad tenía Josías cuando empezó a reinar, y por treinta y un años reinó en Jerusalén.
(Jeremías 25:3) “Desde el año decimotercero de Josías hijo de Amón, el rey de Judá, y hasta el día de hoy, estos veintitrés años me ha ocurrido la palabra de Jehová, y seguí hablándoles, madrugando y hablando, pero ustedes no escucharon.
Tenía que llevar un estremecedor mensaje de juicio y denuncia a los sacerdotes, a los falsos profetas, a los dirigentes y, en general, a todos los que estaban siguiendo el “proceder popular” y obrando “con una infidelidad duradera” (Jer. 6:13; 8:5, 6).
(Jeremías 6:13)
“Porque desde el menor de ellos aun hasta el mayor de ellos, cada uno está sacando para sí ganancia injusta;
(Jeremías 8:10) Por lo tanto, daré sus esposas a otros hombres, sus campos a los que tomen posesión; porque, desde el menor aun hasta el mayor, cada uno está sacando ganancia injusta; desde el profeta hasta el sacerdote mismo, cada uno está obrando falsamente.
(Ezequiel 22:12) Un soborno han tomado en ti con el propósito de derramar sangre. Interés y usura has tomado, y violentamente sigues sacando ganancia de tus compañeros con defraudación, y a mí me has olvidado’, es la expresión del Señor Soberano Jehová.
(Ezequiel 33:31) Y vendrán a ti, como el entrar de gente, y se sentarán delante de ti como mi pueblo; y ciertamente oirán tus palabras, pero no las pondrán por obra, porque con la boca están expresando deseos lujuriosos [y] tras de su ganancia injusta es a donde va su corazón.
(Lucas 16:14) Ahora bien, los fariseos, que eran amantes del dinero, escuchaban todas estas cosas, y le hacían gestos de desprecio.

y desde el profeta aun hasta el sacerdote, cada uno está obrando falsamente.
(Jeremías 2:8) Los sacerdotes mismos no dijeron: ‘¿Dónde está Jehová?’. Y los mismísimos que manejaban la ley no me conocieron; y los pastores mismos transgredieron contra mí, y hasta los profetas profetizaron por Baal, y anduvieron en pos de los que no podían traer provecho.
(Jeremías 14:18) Si realmente salgo al campo, ¡ea!, ¡mira, los muertos a espada! Y si realmente entro en la ciudad, ¡mira, también, las dolencias resultantes del hambre! Porque tanto el profeta mismo como el sacerdote mismo han dado la vuelta hacia una tierra que no han conocido’”.
(Jeremías 23:11) “Porque tanto el profeta mismo como el sacerdote mismo se han contaminado. También en mi propia casa he hallado su maldad —es la expresión de Jehová—.
(Miqueas 3:5) ”Esto es lo que ha dicho Jehová contra los profetas que están haciendo que mi pueblo ande errante, que están mordiendo con los dientes y que realmente claman: ‘¡Paz!’, que, cuando alguien no les pone [algo] en la boca, también de hecho santifican guerra contra este:
(Miqueas 3:11) Sus propios cabezas juzgan meramente por un soborno, y sus propios sacerdotes instruyen solo por precio, y sus propios profetas practican adivinación sencillamente por dinero; sin embargo, sobre Jehová siguen apoyándose, y dicen: “¿No está Jehová en medio de nosotros? No vendrá sobre nosotros ninguna calamidad”.
(Sofonías 3:4) Sus profetas eran insolentes, eran hombres de traición. Sus sacerdotes mismos profanaron lo que era santo; hicieron violencia a [la] ley.
(Jeremías 8:5, 6)
¿Por qué es infiel este pueblo, Jerusalén, con una infidelidad duradera? Se han asido de la artimaña;
(Salmo 119:118) Has echado a un lado a todos los que se descarrían de tus disposiciones reglamentarias; porque su proceder mañoso es falsedad.
(Jeremías 9:6) ”Tu sentarte está en medio de engaño. Por engaño ellos han rehusado conocerme”, es la expresión de Jehová.
han rehusado volverse.
(Isaías 1:20) Pero si rehúsan y realmente son rebeldes, por una espada serán comidos; porque la mismísima boca de Jehová [lo] ha hablado.”
(Jeremías 5:3) Oh Jehová, ¿no están esos ojos tuyos hacia la fidelidad? Los has golpeado, pero ellos no han enfermado. Los exterminaste. Rehusaron aceptar disciplina. Hicieron sus rostros más duros que un peñasco. Rehusaron volverse.
6 He prestado atención,
(Nehemías 9:28) 28 ”Pero en cuanto tenían descanso, volvían a hacer lo que es malo delante de ti, y los dejabas a la mano de sus enemigos, quienes los pisoteaban. Entonces se volvían y clamaban a ti por socorro, y tú mismo oías desde los mismos cielos y los librabas conforme a tu abundante misericordia, vez tras vez.
y me quedé escuchando.
(Salmo 14:2) En cuanto a Jehová, él ha mirado desde el cielo mismo a los hijos de los hombres, para ver si existe alguien que tenga perspicacia, alguien que busque a Jehová.
(Malaquías 3:16) En aquel tiempo los que estaban en temor de Jehová hablaron unos con otros, cada uno con su compañero, y Jehová siguió prestando atención y escuchando. Y un libro de recuerdo empezó a ser escrito delante de él para los que estaban en temor de Jehová y para los que pensaban en su nombre.
No era recta la manera como seguían hablando. No había hombre alguno que se arrepintiera de su maldad,
(Jeremías 5:1) Anden discurriendo por las calles de Jerusalén y vean, ahora, y sepan, y busquen ustedes mismos en sus plazas públicas si acaso pueden hallar un hombre, si acaso existe alguien que haga justicia, alguien que busque fidelidad, y yo la perdonaré.
(2 Pedro 3:9) Jehová no es lento respecto a su promesa, como algunas personas consideran la lentitud, pero es paciente para con ustedes porque no desea que ninguno sea destruido; más bien, desea que todos alcancen el arrepentimiento.
y dijera: ‘¿Qué he hecho?’. Cada uno está volviéndose al proceder popular, como caballo que va lanzándose con ímpetu a la batalla.
(2 Reyes 17:15) 15 y continuaron rechazando sus disposiciones reglamentarias y su pacto que él había celebrado con sus antepasados y sus recordatorios con que les había dado advertencia, y se pusieron a seguir vanos ídolos y se hicieron vanos ellos mismos, aun en imitación de las naciones que estaban todo en derredor de ellos, respecto de las cuales Jehová les había mandado que no hicieran lo mismo que ellas;
¡Qué mensaje tan urgente tenía que proclamar el profeta! ¿Y qué puede decirse de nuestro tiempo? En su gran amor por la humanidad, Jehová ha comisionado a los cristianos ungidos para que actúen como un atalaya, o vigía, espiritual y anuncien el juicio que se avecina. Por décadas, este grupo prefigurado por Jeremías ha exhortado a todos a reconocer la urgencia de nuestros días. La Biblia deja bien claro que Jehová, el Señor del Tiempo, no es lento. Aunque su día llegará justo en el momento que él ha establecido, tomará por sorpresa a este mundo (Sof. 3:8; Mar. 13:33; 2 Ped. 3:9, 10). w11 15/3 4:4, 5
(Sofonías 3:8)
”‘Por lo tanto, manténganse en expectación de mí
(Salmo 27:14) Espera en Jehová; sé animoso, y sea fuerte tu corazón. Sí, espera en Jehová.
(Salmo 37:34) Espera en Jehová y guarda su camino, y él te ensalzará para tomar posesión de la tierra. Cuando los inicuos sean cortados, tú [lo] verás.
(Salmo 62:1) Realmente hacia Dios mi alma está [esperando en] silencio. De él procede mi salvación.
(Salmo 130:7) Siga Israel esperando a Jehová. Porque con Jehová está la bondad amorosa, y de modo abundante está la redención con él.
(Proverbios 20:22) No digas: “¡Ciertamente pagaré el mal!”. Espera en Jehová, y él te salvará.
(Isaías 30:18) Y por lo tanto Jehová se mantendrá en expectación de mostrarles favor a ustedes, y por lo tanto se levantará para mostrarles misericordia. Porque Jehová es un Dios de juicio. Felices son todos los que se mantienen en expectativa de él.
(Santiago 5:7) Ejerzan paciencia, por lo tanto, hermanos, hasta la presencia del Señor. ¡Miren! El labrador sigue esperando el precioso fruto de la tierra, aguardándolo con paciencia hasta que recibe la lluvia temprana y la lluvia tardía.
—es la expresión de Jehová— hasta el día en que me levante a[l] botín,
(Isaías 42:13) 13 Como hombre poderoso Jehová mismo saldrá. Como guerrero despertará celo. Gritará, sí, soltará un grito de guerra; sobre sus enemigos se mostrará más poderoso.
porque mi decisión judicial es reunir naciones,
(Joel 3:2) también ciertamente juntaré a todas las naciones y las haré bajar a la llanura baja de Jehosafat; y ciertamente me pondré en juicio con ellas allí a causa de mi pueblo y mi herencia Israel, a quienes esparcieron entre las naciones; y repartieron mi propia tierra.
(Zacarías 14:2) Y ciertamente recogeré a todas las naciones contra Jerusalén para la guerra; y la ciudad realmente será tomada y las casas saqueadas, y las mujeres mismas serán forzadas. Y la mitad de la ciudad tendrá que salir al destierro; pero en cuanto a los restantes del pueblo, no serán cortados de la ciudad.
(Revelación 16:14) Son, de hecho, expresiones inspiradas por demonios, y ejecutan señales, y salen a los reyes de toda la tierra habitada, para reunirlos a la guerra del gran día de Dios el Todopoderoso.
(Revelación 19:19) Y vi a la bestia salvaje y a los reyes de la tierra y a sus ejércitos reunidos para hacer la guerra contra el que iba sentado en el caballo y contra su ejército.
para que yo junte reinos, a fin de derramar sobre ellos mi denunciación,
(Salmo 69:24) Derrama sobre ellos tu denunciación, y que tu propia cólera ardiente los alcance.
(Jeremías 10:10) Pero Jehová es en verdad Dios. Él es el Dios vivo y el Rey hasta tiempo indefinido. A causa de su indignación la tierra se mecerá, y ninguna de las naciones podrá sostenerse bajo su denunciación.
toda mi cólera ardiente; porque por el fuego de mi celo toda la tierra será devorada.
(Deuteronomio 32:22) Porque se ha encendido un fuego en mi cólera y arderá hasta el Seol, el lugar más bajo, y consumirá la tierra y sus productos e incendiará los fundamentos de las montañas.
(Isaías 34:2) Porque Jehová tiene indignación contra todas las naciones, y furia contra todo el ejército de ellas. Tiene que darlos por entero a la destrucción; tiene que darlos al degüello.
(Ezequiel 36:5) por lo tanto, esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová: ‘Ciertamente en el fuego de mi celo de veras hablaré contra los restantes de las naciones y contra Edom, todo él, los que han dado mi tierra a sí mismos como posesión con el regocijo de todo el corazón, con escarnio en [el] alma, por motivo de su dehesa [y] por el saqueo’”’.
(Sofonías 1:18) Ni su plata ni su oro podrá librarlos en el día del furor de Jehová; sino que por el fuego de su celo toda la tierra será devorada, porque él hará un exterminio, realmente uno terrible, de todos los habitantes de la tierra.”
(Marcos 13:33)
Sigan mirando, manténganse despiertos,

(Romanos 13:11) [Hagan] esto, también, porque ustedes conocen el tiempo, que ya es hora de que despierten del sueño, porque ahora está más cerca nuestra salvación que cuando nos hicimos creyentes.
(1 Tesalonicenses 5:6) Pues bien, entonces, no sigamos durmiendo como los demás, sino quedémonos despiertos y mantengamos nuestro juicio.

(Lucas 21:36) Manténganse despiertos, pues, en todo tiempo haciendo ruego para que logren escapar de todas estas cosas que están destinadas a suceder, y estar en pie delante del Hijo del hombre”.
(1 Corintios 15:34) Despierten de manera justa al estado sobrio y no practiquen el pecado, porque algunos no tienen conocimiento de Dios. Hablo para hacer que sientan vergüenza.
(1 Tesalonicenses 5:6) Pues bien, entonces, no sigamos durmiendo como los demás, sino quedémonos despiertos y mantengamos nuestro juicio.
(Isaías 56:1) 56 Esto es lo que ha dicho Jehová: “Guarden el derecho y hagan lo que es justo. Porque a la mano está mi salvación para entrar, y mi justicia para ser revelada.
porque no saben cuándo es el tiempo señalado.
(Mateo 25:13) ”Manténganse alerta, pues, porque no saben ni el día ni la hora.
(Lucas 21:34) ”Mas presten atención a sí mismos para que sus corazones nunca lleguen a estar cargados debido a comer con exceso y beber con exceso, y por las inquietudes de la vida, y de repente esté aquel día sobre ustedes instantáneamente

(2 Pedro 3:9, 10)
Jehová no es lento respecto a su promesa,
(Isaías 30:18) Y por lo tanto Jehová se mantendrá en expectación de mostrarles favor a ustedes, y por lo tanto se levantará para mostrarles misericordia. Porque Jehová es un Dios de juicio. Felices son todos los que se mantienen en expectativa de él.
(Habacuc 2:3) Porque [la] visión es todavía para el tiempo señalado, y sigue jadeando hasta el fin, y no dirá mentira. Aun si tardara, manténte en expectación de ella; porque sin falta se realizará. No llegará tarde.

como algunas personas consideran la lentitud, pero es paciente para con ustedes porque no desea que ninguno sea destruido; más bien, desea que todos alcancen el arrepentimiento.
(Isaías 30:19) Cuando el mismo pueblo de Sión more en Jerusalén, no llorarás de manera alguna. Sin falta él te mostrará favor al sonido de tu clamor; luego que él lo oiga, realmente te responderá.
(Romanos 2:4) ¿O desprecias las riquezas de su bondad y longanimidad y gran paciencia, porque ignoras que la [cualidad] bondadosa de Dios está tratando de conducirte al arrepentimiento?

10 Sin embargo, el día de Jehová
(Joel 2:31) El sol mismo será convertido en oscuridad, y la luna en sangre, antes de la venida del día de Jehová, grande e inspirador de temor.
(Sofonías 1:14) ”El gran día de Jehová está cerca. Está cerca, y hay un apresurarse muchísimo [de él]. El sonido del día de Jehová es amargo. Allí un hombre poderoso da un grito.

vendrá como ladrón,
(1 Tesalonicenses 5:2) 2 Porque ustedes mismos saben bastante bien que el día de Jehová viene exactamente como ladrón en la noche.

y en este los cielos pasarán
(Revelación 21:1) 21 Y vi un nuevo cielo y una nueva tierra; porque el cielo anterior y la tierra anterior habían pasado, y el mar ya no existe.

con un ruido de silbido,
(Revelación 6:14) 14 Y el cielo se apartó como un rollo que se va enrollando, y toda montaña y [toda] isla fueron removidas de sus lugares.

pero los elementos, estando intensamente calientes, serán disueltos,
(Efesios 2:2) en los cuales en un tiempo anduvieron conforme al sistema de cosas de este mundo, conforme al gobernante de la autoridad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de la desobediencia.
(Colosenses 2:8) Cuidado: quizás haya alguien que se los lleve como presa suya mediante la filosofía y el vano engaño según la tradición de los hombres, según las cosas elementales del mundo y no según Cristo;

y la tierra
(Isaías 13:13) Por eso haré que el cielo mismo se agite, y la tierra se mecerá y moverá de su lugar ante el furor de Jehová de los ejércitos y ante el día de su cólera ardiente.
(Mateo 24:35) El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras de ningún modo pasarán.

y las obras [que hay] en ella serán descubiertas.
(Salmo 37:10) Y solo un poco más de tiempo, y el inicuo ya no será; y ciertamente darás atención a su lugar, y él no será.
(Isaías 13:9) ”¡Miren! Viene el mismísimo día de Jehová, cruel tanto con furor como con cólera ardiente, a fin de hacer de la tierra un objeto de pasmo, y para aniquilar a los pecadores [de la tierra] de en medio de ella.
(Sofonías 1:18) Ni su plata ni su oro podrá librarlos en el día del furor de Jehová; sino que por el fuego de su celo toda la tierra será devorada, porque él hará un exterminio, realmente uno terrible, de todos los habitantes de la tierra.”
*** w11 15/3 Mantengámonos despiertos tal como Jeremías ***
Mantengámonos despiertos tal como Jeremías
“[Yo, Jehová,] me mantengo despierto respecto a mi palabra para ponerla por obra.” (JER. 1:12)
EN LAS colinas de Israel y el Líbano, uno de los primeros árboles que florecen después del invierno es el almendro, que comienza a echar sus hermosas flores blancas o rosadas a finales de enero o principios de febrero. De hecho, en hebreo su nombre significa “el que despierta”.
2 Cuando Jehová nombró profeta a Jeremías, se valió de esta característica del almendro para ilustrar un importante hecho. En una visión, le mostró un retoño de este árbol, y luego pasó a explicarle el significado: “Me mantengo despierto respecto a mi palabra para ponerla por obra” (Jer. 1:11, 12). Tal como el almendro “despertaba” temprano, Dios “madrugaba” para enviar profetas a advertir a los judíos que pagarían muy cara su desobediencia (Jer. 7:25). Y no descansaría, sino que seguiría “despierto” hasta que se cumpliera su palabra. En el año 607 antes de nuestra era, justo cuando lo había decretado, ejecutó el castigo contra la nación apóstata de Judá.
3 Hoy, Jehová también está despierto y muy atento a fin de llevar a cabo su propósito. Es imposible que falte a su palabra. Ahora bien, ¿cómo influye en nosotros este hecho? ¿Realmente confiamos en que ahora, en este año 2011, Dios sigue “despierto” y va a cumplir sus promesas? Si nos han surgido dudas y nos estamos adormilando espiritualmente, debemos sacudirnos el sueño ya (Rom. 13:11). Alguien que se mantuvo siempre alerta a fin de cumplir su ministerio fue Jeremías. Si analizamos cómo lo logró y cuál fue su motivación, nos será más fácil perseverar en la obra que Jehová nos ha encargado a nosotros.
Un mensaje urgente
4 Es probable que Jeremías rondara los 25 años cuando recibió su comisión de vigía espiritual (Jer. 1:1, 2). Pero aun así se sentía como un niño, completamente incapaz de dirigirles la palabra a los ancianos de la nación, hombres de gran autoridad y experiencia (Jer. 1:6). Tenía que llevar un estremecedor mensaje de juicio y denuncia a los sacerdotes, a los falsos profetas, a los dirigentes y, en general, a todos los que estaban siguiendo el “proceder popular” y obrando “con una infidelidad duradera” (Jer. 6:13; 8:5, 6). El glorioso templo del rey Salomón, que era el centro de la religión verdadera desde hacía casi cuatrocientos años, sería demolido. Además, Jerusalén y Judá quedarían desoladas, y sus habitantes irían cautivos al destierro. ¡Qué mensaje tan urgente tenía que proclamar el profeta!
5 ¿Y qué puede decirse de nuestro tiempo? En su gran amor por la humanidad, Jehová ha comisionado a los cristianos ungidos para que actúen como un atalaya, o vigía, espiritual y anuncien el juicio que se avecina. Por décadas, este grupo prefigurado por Jeremías ha exhortado a todos a reconocer la urgencia de nuestros días (Jer. 6:17). La Biblia deja bien claro que Jehová, el Señor del Tiempo, no es lento. Aunque su día llegará justo en el momento que él ha establecido, tomará por sorpresa a este mundo (Sof. 3:8; Mar. 13:33; 2 Ped. 3:9, 10).
6 Nunca olvidemos que Jehová está muy despierto y que traerá su glorioso nuevo mundo sin ninguna demora. Los cristianos representados por Jeremías lo saben muy bien, y eso los impulsa a actuar con diligencia. Y lo mismo sucede con sus compañeros con esperanza terrenal, quienes se mantienen alertas y conscientes de que su mensaje es cada día más urgente. Jesús señaló que todos deben tener la oportunidad de decidir si apoyarán al Reino de Dios o no. En este artículo veremos tres cualidades que ayudaron a Jeremías a no dormirse y a efectuar su ministerio, y que permitirán que nosotros hagamos lo mismo.
Amor por las personas
7 ¿Por qué proclamó Jeremías su mensaje a pesar de las adversidades? Porque quería a sus hermanos judíos. Él sabía que muchos estaban sufriendo por culpa de los falsos pastores (Jer. 23:1, 2). Por eso se compadecía y realizaba su labor con mucho cariño. Deseaba que escucharan el mensaje de Dios y siguieran viviendo. De hecho, estaba tan preocupado por ellos que lloró pensando en la calamidad que les esperaba (léanse Jeremías 8:21 y 9:1). Asimismo, a lo largo del libro de Lamentaciones, revela de forma muy gráfica su gran amor e interés por el nombre de Dios y por su pueblo (Lam. 4:6, 9). ¿Cómo reaccionamos nosotros cuando vemos que las personas están “desolladas y desparramadas como ovejas sin pastor”? ¿Sentimos el deseo de llevarles el consolador mensaje del Reino de Dios? (Mat. 9:36.)
8 En vez de dejarse ayudar, los judíos hicieron sufrir mucho a Jeremías. Sin embargo, él no se amargó ni tomó represalias. Siempre fue paciente y bondadoso con ellos, incluso con el corrupto rey Sedequías. A pesar de que este monarca lo había entregado a quienes deseaban su muerte, el profeta le rogó más tarde que obedeciera la voz de Jehová (Jer. 38:4, 5, 19, 20). ¿Amamos nosotros al prójimo tanto como Jeremías?
Dios infunde valor
9 Cuando Jehová le comunicó su comisión, Jeremías trató de rechazarla con excusas, lo cual demuestra que la valentía y la determinación con que actuó más adelante no le venían de nacimiento. La extraordinaria fortaleza que demostró durante su carrera de profeta se debía a que confiaba plenamente en Dios. Así es, Jehová se mantuvo a su lado “como un terrible poderoso”, brindándole su apoyo y dándole fuerzas para efectuar su ministerio (Jer. 20:11). Su reputación de valentía llegó a tal punto que, siglos después, algunos judíos creyeron que Jesús era Jeremías resucitado al ver la intrepidez con que actuaba (Mat. 16:13, 14).
10 Jehová es el “Rey de las naciones”. Por eso tenía el derecho de enviar a su profeta con un mensaje de juicio contra las naciones y los reinos de su día (Jer. 10:6, 7). Los cristianos ungidos que aún viven en la Tierra también están “sobre las naciones y sobre los reinos” (Jer. 1:10). ¿En qué sentido? El Soberano del universo les ha dado una comisión como la de Jeremías, lo que les permite anunciar a todos los reinos y naciones del mundo que serán destruidos en el momento y del modo que Jehová ha establecido. Realizan esta proclamación con la autoridad que les ha conferido el Dios Altísimo y empleando el lenguaje claro de su Palabra inspirada (Jer. 18:7-10; Rev. 11:18). El “Jeremías” de nuestro tiempo está decidido a no aflojar el ritmo. Este grupo nunca dejará de cumplir su comisión de difundir por toda la Tierra los mensajes condenatorios de Jehová.
11 A veces nos desaniman la indiferencia y la oposición de la gente u otros problemas (2 Cor. 1:8). Pero, como Jeremías, no nos rendimos. Más bien, “cobramos denuedo” al apoyarnos constantemente en Jehová mediante la oración (1 Tes. 2:2). Es necesario que nos mantengamos despiertos a fin de cumplir la labor que nos ha asignado nuestro Padre. Debemos tomar la firme resolución de anunciar sin descanso que, en cumplimiento del modelo profético, la cristiandad será destruida como lo fue la Jerusalén apóstata. Los cristianos ungidos están decididos a seguir proclamando no solo “el año de la buena voluntad de parte de Jehová”, sino también “el día de la venganza de parte de nuestro Dios” (Isa. 61:1, 2; 2 Cor. 6:2).
“El regocijo de mi corazón”
12 Para Jeremías, su labor era una fuente de gozo. Por eso le dijo a Jehová: “Fueron halladas tus palabras, y procedí a comerlas; y tu palabra llega a ser para mí el alborozo y el regocijo de mi corazón; porque tu nombre ha sido llamado sobre mí, oh Jehová Dios de los ejércitos” (Jer. 15:16). El profeta consideraba un gran honor representar al Dios verdadero y proclamar su palabra. Cabe notar que, cuando prestaba atención a las burlas de la gente, perdía la alegría, pero cuando se concentraba en la hermosura y la importancia de su mensaje, la recuperaba (Jer. 20:8, 9).
13 A fin de seguir predicando con gozo, nosotros también necesitamos nutrirnos con “alimento sólido”, es decir, con las verdades bíblicas más profundas (Heb. 5:14). El estudio concienzudo de la Palabra de Dios fortalece nuestra fe (Col. 2:6, 7). Además, nos ayuda a comprender cuánto le importa a Jehová lo que hacemos. Por eso, si nos cuesta trabajo encontrar tiempo para leer y estudiar la Biblia, hemos de hacer cambios en nuestro horario. Si estudiamos y meditamos, aunque solo sea unos minutos al día, nos sentiremos más cerca de Jehová y “el alborozo y el regocijo” nos llenarán el corazón, tal como sucedió en el caso de Jeremías.
14 Aunque Jeremías proclamó incansablemente las advertencias y los mensajes condenatorios de Jehová, nunca olvidó que también había sido enviado “para edificar y para plantar”, es decir, llevar un mensaje de esperanza y restauración (Jer. 1:10). Y esa labor dio fruto, pues cuando llegó la destrucción de Jerusalén en el año 607 antes de nuestra era, se salvaron algunas personas, tanto judías como de otros pueblos. Por ejemplo, sabemos del caso de los recabitas, Ébed-mélec y Baruc (Jer. 35:19; 39:15-18; 43:5-7). La actitud de estos devotos y leales amigos de Jeremías ilustra muy bien la de los cristianos que tienen la esperanza de vivir en la Tierra. Ellos son los amigos del “Jeremías” de la actualidad. ¡Qué feliz está el resto ungido de poder edificar la fe y la esperanza de la “gran muchedumbre”! (Rev. 7:9.) A su vez, estos leales compañeros de los ungidos tienen la gran satisfacción de ayudar a más personas sinceras a conocer la verdad.
15 Los cristianos comprendemos que la predicación de las buenas nuevas no es solo un servicio a favor del prójimo, sino parte de nuestra adoración a Jehová. Por lo tanto, sea que la gente nos escuche o no, rendirle a Dios servicio sagrado mediante nuestro ministerio nos produce mucha alegría (Sal. 71:23; léase Romanos 1:9).
Mantengámonos despiertos y cumplamos nuestra comisión
16 Algo que nos ayuda a ver con más claridad la urgencia de los días en que vivimos es la profecía de Revelación 17:10. En ella se habla del séptimo rey, es decir, de una potencia mundial doble formada por Gran Bretaña y Estados Unidos, que ya ha venido a la existencia. Además, se señala que “tiene que permanecer un corto tiempo”. A estas alturas, ese “corto tiempo” tiene que estar a punto de terminar. El profeta Habacuc nos asegura que “la visión [acerca del fin de este mundo] es todavía para el tiempo señalado”. Y luego añade: “Manténte en expectación de ella; porque sin falta se realizará. No llegará tarde” (Hab. 2:3).
17 Preguntémonos: “¿Refleja mi forma de vivir que comprendo la urgencia de los tiempos y que estoy convencido de que el fin es inminente? ¿O muestro con mis decisiones y prioridades que he retrasado el fin en mi mente o que ni siquiera estoy seguro de que llegará?”.
18 Los cristianos ungidos aún no han terminado su labor de vigía espiritual (léase Jeremías 1:17-19). ¡Qué alegría es ver que continúan firmes en su puesto, como “una columna de hierro” o “una ciudad fortificada”! Mantienen sus “lomos ceñidos con la verdad”, es decir, se conservan fuertes mediante la Palabra de Dios a fin de completar su misión (Efe. 6:14). Y con esa misma determinación, la gran muchedumbre los apoya para que logren cumplir su objetivo.
19 Este no es el momento de aflojar el paso en la obra del Reino, sino de reflexionar en la profunda verdad que se presenta en Jeremías 12:5 (léase). Todos tenemos problemas que ponen a prueba nuestra fe, ¿no es cierto? Hacerles frente es como participar en una carrera en la que los corredores son “hombres de a pie”. Sin embargo, al ir acercándose la “gran tribulación”, se irán agravando los obstáculos (Mat. 24:21). Serán tan duros que, para superarlos, habrá que hacer un gran esfuerzo, como si estuviéramos compitiendo “en una carrera [contra] caballos”. Es obvio que se necesita muchísimo aguante y fortaleza para tratar de seguirle el paso a un caballo. Por eso, en realidad, las pruebas actuales nos están preparando para que podamos resistir las que nos esperan.
20 Al igual que Jeremías, los cristianos podemos tener éxito en nuestro ministerio. El amor, la valentía y el gozo fueron algunas de las cualidades que le dieron fuerzas al profeta para efectuar fielmente su labor durante sesenta y siete años. Y la imagen del hermoso almendro en flor nos recuerda que Jehová está despierto y muy atento a fin de cumplir su palabra. Nosotros también tenemos buenas razones para permanecer alerta. Como Jeremías, podemos lograrlo.
¿Lo recuerda?
• ¿Por qué decimos que el amor ayudó a Jeremías a mantenerse despierto y cumplir su asignación?
• ¿Por qué necesitamos que Jehová nos infunda valor?
• ¿Qué ayudó a Jeremías a conservar el gozo?
• ¿Por qué debemos mantenernos despiertos?
[Preguntas del estudio]
 1, 2. ¿Cómo ilustra el almendro el hecho de que Jehová se mantiene despierto?
 3. ¿Qué actitud mantiene Jehová?
 4. ¿Qué desafíos afrontó Jeremías al cumplir su comisión, y por qué era tan urgente su mensaje?
 5, 6. a) ¿Cómo está empleando hoy día Jehová a los cristianos representados por Jeremías? b) ¿De qué hablaremos en este artículo?
 7. ¿Por qué decimos que el amor impulsó a Jeremías a predicar a pesar de las adversidades?
 8. ¿Cómo sabemos que Jeremías no se dejó amargar por el sufrimiento?
 9. ¿Cómo sabemos que el valor de Jeremías provenía de Dios?
10. ¿En qué sentido está el resto ungido “sobre las naciones y sobre los reinos”?
11. ¿Qué nos ayudará a seguir predicando a pesar de los problemas?
12. a) ¿Cómo sabemos que Jeremías conservó la alegría? b) ¿Qué le ayudaba al profeta a no perder el gozo?
13. ¿Por qué es necesario que nos alimentemos con las verdades profundas de la Biblia para no perder el gozo?
14, 15. a) ¿Qué frutos dio la fiel labor de Jeremías? b) ¿Cómo vemos los cristianos la predicación?
16, 17. ¿Cómo destacan Revelación 17:10 y Habacuc 2:3 la urgencia de los tiempos?
18, 19. ¿Por qué no es este el momento de aflojar el paso?
20. ¿Qué estamos decididos a lograr?



(Jeremías 1:12) 12 Y Jehová pasó a decirme: “Has visto bien, porque me mantengo despierto respecto a mi palabra para ponerla por obra”.
(Jeremías 1:11, 12) 11 Y siguió ocurriéndome la palabra de Jehová, y dijo: “¿Qué estás viendo, Jeremías?”. De modo que dije: “Un retoño de almendro es lo que estoy viendo”. 12 Y Jehová pasó a decirme: “Has visto bien, porque me mantengo despierto respecto a mi palabra para ponerla por obra”.
(Jeremías 7:25) 25 desde el día en que los antepasados de ustedes salieron de la tierra de Egipto hasta el día de hoy; y yo seguí enviando a ustedes todos mis siervos los profetas, madrugando diariamente y enviándo[los].
(Romanos 13:11) 11 [Hagan] esto, también, porque ustedes conocen el tiempo, que ya es hora de que despierten del sueño, porque ahora está más cerca nuestra salvación que cuando nos hicimos creyentes.
(Jeremías 1:1, 2) 1 Las palabras de Jeremías hijo de Hilquías, uno de los sacerdotes que estaban en Anatot, en la tierra de Benjamín; 2 a quien le ocurrió la palabra de Jehová en los días de Josías hijo de Amón, el rey de Judá, en el año decimotercero de reinar él.
(Jeremías 1:6) 6 Pero yo dije: “¡Ay, oh Señor Soberano Jehová! Mira que realmente no sé hablar, pues solo soy un muchacho”.
(Jeremías 6:13) 13 “Porque desde el menor de ellos aun hasta el mayor de ellos, cada uno está sacando para sí ganancia injusta; y desde el profeta aun hasta el sacerdote, cada uno está obrando falsamente.
(Jeremías 8:5, 6) 5 ¿Por qué es infiel este pueblo, Jerusalén, con una infidelidad duradera? Se han asido de la artimaña; han rehusado volverse. 6 He prestado atención, y me quedé escuchando. No era recta la manera como seguían hablando. No había hombre alguno que se arrepintiera de su maldad, y dijera: ‘¿Qué he hecho?’. Cada uno está volviéndose al proceder popular, como caballo que va lanzándose con ímpetu a la batalla.
(Jeremías 6:17) 17 “Y levanté sobre ustedes atalayas: ‘¡Presten atención al sonido del cuerno!’.” Pero ellos siguieron diciendo: “No vamos a prestar atención”.
(Sofonías 3:8) 8 ”‘Por lo tanto, manténganse en expectación de mí —es la expresión de Jehová— hasta el día en que me levante a[l] botín, porque mi decisión judicial es reunir naciones, para que yo junte reinos, a fin de derramar sobre ellos mi denunciación, toda mi cólera ardiente; porque por el fuego de mi celo toda la tierra será devorada.
(Marcos 13:33) 33 Sigan mirando, manténganse despiertos, porque no saben cuándo es el tiempo señalado.
(2 Pedro 3:9, 10) 9 Jehová no es lento respecto a su promesa, como algunas personas consideran la lentitud, pero es paciente para con ustedes porque no desea que ninguno sea destruido; más bien, desea que todos alcancen el arrepentimiento. 10 Sin embargo, el día de Jehová vendrá como ladrón, y en este los cielos pasarán con un ruido de silbido, pero los elementos, estando intensamente calientes, serán disueltos, y la tierra y las obras [que hay] en ella serán descubiertas.
(Jeremías 23:1, 2) 23 “¡Ay de los pastores que están destruyendo y esparciendo las ovejas de mi apacentamiento!”, es la expresión de Jehová. 2 Por lo tanto, esto es lo que ha dicho Jehová el Dios de Israel contra los pastores que están pastoreando a mi pueblo: “Ustedes mismos han esparcido mis ovejas; y siguieron dispersándolas, y no han dirigido su atención a ellas”. “Aquí voy a dirigir mi atención a ustedes por la maldad de sus tratos”, es la expresión de Jehová.
(Jeremías 8:21) 21 Por el quebranto de la hija de mi pueblo he quedado desbaratado. Me he entristecido. Pasmo absoluto se ha apoderado de mí.
(Jeremías 9:1) 9 ¡Oh, que mi cabeza fuera aguas, y que mis ojos fueran fuente de lágrimas! Entonces podría llorar día y noche por aquellos de la hija de mi pueblo que fueron muertos.
(Lamentaciones 4:6)  6 El [castigo por el] error de la hija de mi pueblo también llega a ser mayor que el [castigo por el] pecado de Sodoma, la cual fue derribada como en un momento, y a la cual ninguna mano se dirigió [con ayuda].
(Lamentaciones 4:9)  9 Mejores han resultado ser los muertos a espada que los muertos por el hambre, porque estos languidecen, traspasados por falta del producto del campo abierto.
(Mateo 9:36) 36 Al ver las muchedumbres, se compadeció de ellas, porque estaban desolladas y desparramadas como ovejas sin pastor.
(Jeremías 38:4, 5) 4 Y los príncipes empezaron a decir al rey: “Désele muerte, por favor, a este hombre, porque así es como está debilitando las manos de los hombres de guerra que quedan en esta ciudad y las manos de toda la gente, hablándoles conforme a estas palabras. Porque este hombre no es uno que busque la paz de este pueblo, sino calamidad”. 5 De modo que el rey Sedequías dijo: “¡Miren! Está en la mano de ustedes. Porque no hay absolutamente nada en que el rey mismo pueda prevalecer contra ustedes”.
(Jeremías 38:19, 20) 19 Entonces el rey Sedequías dijo a Jeremías: “Me tienen aterrado los judíos que se han pasado a los caldeos, no sea que me den en mano de ellos y estos realmente me traten abusivamente”. 20 Pero Jeremías dijo: “No harán tal dar. Obedece, por favor, la voz de Jehová en lo que te estoy hablando, y te irá bien, y tu alma continuará viviendo. . .
(Jeremías 20:11) 11 Pero Jehová estuvo conmigo como un terrible poderoso. Por eso los mismísimos que me persiguen tropezarán y no prevalecerán. Ciertamente quedarán muy avergonzados, porque no habrán prosperado. [Su] humillación, de duración indefinida, será una que no se olvidará.
(Mateo 16:13, 14) 13 Ahora bien, cuando hubo llegado a las partes de Cesarea de Filipo, Jesús se puso a preguntar a sus discípulos: “¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del hombre?”. 14 Ellos dijeron: “Algunos dicen Juan el Bautista; otros, Elías; otros más, Jeremías o uno de los profetas”.
(Jeremías 10:6, 7) 6 De ninguna manera hay alguien semejante a ti, oh Jehová. Tú eres grande, y tu nombre es grande en poderío. 7 ¿Quién no debería temerte, oh Rey de las naciones?, porque eso es propio [respecto] a ti; porque entre todos los sabios de las naciones y entre todas sus gobernaciones reales no hay absolutamente nadie semejante a ti.
(Jeremías 1:10) 10 Ve, te he comisionado este día para estar sobre las naciones y sobre los reinos, para desarraigar y para demoler y para destruir y para derruir, para edificar y para plantar”.
(Jeremías 18:7-10) 7 En cualquier momento que yo hable contra una nación y contra un reino para desarraigar[la] y para demoler[la] y para destruir[la], 8 y esa nación realmente se vuelva de su maldad contra la cual haya hablado, yo también ciertamente sentiré pesar por la calamidad que haya pensado ejecutar en ella. 9 Pero en cualquier momento que yo hable respecto de una nación y respecto de un reino para edificar[la] y para plantar[la], 10 y esta realmente haga lo que es malo a mis ojos al no obedecer mi voz, yo también ciertamente sentiré pesar por el bien que yo [me] hubiera dicho que haría para su bien’.
(Revelación 11:18) 18 Pero las naciones se airaron, y vino tu propia ira, y el tiempo señalado para que los muertos sean juzgados, y para dar [su] galardón a tus esclavos los profetas y a los santos y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y para causar la ruina de los que están arruinando la tierra”.
(2 Corintios 1:8) 8 Porque no deseamos que estén en ignorancia, hermanos, acerca de la tribulación que nos sucedió en el [distrito de] Asia, que estuvimos bajo extremada presión más allá de nuestras fuerzas, de modo que nos sentimos muy inseguros hasta de nuestra vida.
(1 Tesalonicenses 2:2) 2 sino que, después de primero haber sufrido y de haber sido tratados insolentemente (como ustedes lo saben) en Filipos, cobramos denuedo por medio de nuestro Dios para hablarles las buenas nuevas de Dios con mucho luchar.
(Isaías 61:1, 2) 61 El espíritu del Señor Soberano Jehová está sobre mí, por razón de que Jehová me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los mansos. Me ha enviado para vendar a los quebrantados de corazón, para proclamar libertad a los [que han sido] llevados cautivos y la apertura ancha [de los ojos] aun a los prisioneros; 2 para proclamar el año de la buena voluntad de parte de Jehová, y el día de la venganza de parte de nuestro Dios; para consolar a todos los que están de duelo;
(2 Corintios 6:2) 2 Porque él dice: “En un tiempo acepto te oí, y en día de salvación te ayudé”. ¡Miren! Ahora es el tiempo especialmente acepto. ¡Miren! Ahora es el día de salvación.
(Jeremías 15:16) 16 Fueron halladas tus palabras, y procedí a comerlas; y tu palabra llega a ser para mí el alborozo y el regocijo de mi corazón; porque tu nombre ha sido llamado sobre mí, oh Jehová Dios de los ejércitos.
(Jeremías 20:8, 9) 8 Porque cuantas veces grito, clamo. Violencia y expoliación son lo que clamo. Porque la palabra de Jehová vino a ser para mí causa de oprobio y de mofa todo el día. 9 Y dije: “No voy a hacer mención de él, y no hablaré más en su nombre”. Y en mi corazón resultó ser como un fuego ardiente, encerrado en mis huesos; y me cansé de contener, y no pude [aguantarlo].
(Hebreos 5:14) 14 Pero el alimento sólido pertenece a personas maduras, a los que mediante el uso tienen sus facultades perceptivas entrenadas para distinguir tanto lo correcto como lo incorrecto.
(Colosenses 2:6, 7) 6 Por lo tanto, como han aceptado a Cristo Jesús el Señor, sigan andando en unión con él, 7 arraigados y siendo edificados en él y siendo estabilizados en la fe, así como se les enseñó, rebosando de [fe] en acción de gracias.
(Jeremías 1:10) 10 Ve, te he comisionado este día para estar sobre las naciones y sobre los reinos, para desarraigar y para demoler y para destruir y para derruir, para edificar y para plantar”.
(Jeremías 35:19) 19 por lo tanto esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel: “No será cortado de Jonadab hijo de Recab un hombre que siempre esté de pie delante de mí”’”.
(Jeremías 39:15-18) 15 Y a Jeremías le ocurrió la palabra de Jehová mientras se hallaba encerrado en el Patio de la Guardia, diciendo: 16 “Ve, y tienes que decir a Ébed-mélec el etíope: ‘Esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos, el Dios de Israel: “Mira, voy a realizar mis palabras sobre esta ciudad para calamidad y no para bien, y ciertamente sucederán delante de ti en aquel día”’. 17 ”‘Y de veras te libraré en aquel día —es la expresión de Jehová—, y no serás dado en la mano de los hombres de quienes tú mismo estás asustado.’ 18 ”‘Porque sin falta te suministraré un escape, y no caerás a espada; y ciertamente llegarás a tener tu alma como despojo, porque has confiado en mí’, es la expresión de Jehová”.
(Jeremías 43:5-7) 5 De manera que Johanán hijo de Qaréah y todos los jefes de las fuerzas militares tomaron a todo el resto de Judá que había regresado de todas las naciones a las cuales habían sido dispersados, para residir por algún tiempo en la tierra de Judá, 6 aun a los hombres físicamente capacitados y las esposas y los niñitos y las hijas del rey y toda alma que Nebuzaradán el jefe de la guardia de corps había dejado que se quedaran con Guedalías hijo de Ahiqam hijo de Safán, y a Jeremías el profeta y a Baruc hijo de Nerías. 7 Y por fin entraron en la tierra de Egipto, pues no obedecieron la voz de Jehová; y gradualmente llegaron hasta Tahpanhés.
(Revelación 7:9) 9 Después de estas cosas vi, y, ¡miren!, una gran muchedumbre, que ningún hombre podía contar, de todas las naciones y tribus y pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos de largas ropas blancas; y había ramas de palmera en sus manos.
(Salmo 71:23) 23 Mis labios clamarán gozosamente cuando me sienta inclinado a celebrarte con melodía, aun mi alma que tú has redimido.
(Romanos 1:9) 9 Porque Dios, a quien rindo servicio sagrado con mi espíritu respecto a las buenas nuevas acerca de su Hijo, es mi testigo de cómo sin cesar siempre hago mención de ustedes en mis oraciones,
(Revelación 17:10) 10 Y hay siete reyes: cinco han caído, uno es, el otro todavía no ha llegado, pero cuando sí llegue tiene que permanecer un corto tiempo.
(Habacuc 2:3) 3 Porque [la] visión es todavía para el tiempo señalado, y sigue jadeando hasta el fin, y no dirá mentira. Aun si tardara, manténte en expectación de ella; porque sin falta se realizará. No llegará tarde.
(Jeremías 1:17-19) 17 ”Y en cuanto a ti, debes ceñirte las caderas, y tienes que levantarte y hablarles todo lo que yo mismo te mande. No te sobrecojas de terror alguno a causa de ellos, para que yo no te infunda terror delante de ellos. 18 Pero en cuanto a mí, aquí he hecho de ti hoy una ciudad fortificada y una columna de hierro y muros de cobre contra todo el país, para con los reyes de Judá, para con sus príncipes, para con sus sacerdotes y para con la gente de la tierra. 19 Y de seguro pelearán contra ti, pero no prevalecerán contra ti, porque: ‘Yo estoy contigo —es la expresión de Jehová— para librarte’”.
(Efesios 6:14) 14 Estén firmes, por lo tanto, teniendo los lomos ceñidos con la verdad, y teniendo puesta la coraza de la justicia,
(Jeremías 12:5) 5 Porque con hombres de a pie has corrido, y te rendían de cansancio, ¿cómo, pues, puedes correr en una carrera con caballos? ¿Y en la tierra de paz estás con confianza? De modo que, ¿cómo actuarás entre los orgullosos [matorrales] a lo largo del Jordán?
(Mateo 24:21) 21 porque entonces habrá gran tribulación como la cual no ha sucedido una desde el principio del mundo hasta ahora, no, ni volverá a suceder.
(Revelación 17:10) 10 Y hay siete reyes: cinco han caído, uno es, el otro todavía no ha llegado, pero cuando sí llegue tiene que permanecer un corto tiempo.
(Habacuc 2:3) 3 Porque [la] visión es todavía para el tiempo señalado, y sigue jadeando hasta el fin, y no dirá mentira. Aun si tardara, manténte en expectación de ella; porque sin falta se realizará. No llegará tarde.

No hay comentarios:

Publicar un comentario